jueves, 6 de noviembre de 2008

Adiós a la clase media y el pequeño comercio



El tramo del zaragozano Paseo de Calanda que discurre entre la Plaza Roma y la Avenida de Madrid, cuesta, a paso medio, diez minutos recorrerlo. Entre ambas aceras hay 19 bares. Algo típicamente español, de no ser porque metros de acera completos los ocupan orientales que encadenan la propiedad de estos establecimientos hasta hace poco en manos de españoles. Nada que objetar, excepto que el porcentaje de bares de "chinos" (tal y como se conocen coloquialmente, aunque sirvan tapas y vinitos de esta tierra y no la suya) es asombrosamente imperante y creciente, algo inconcebible hace pocos años y difícilmente explicable de no ser porque... (?) El por qué lo dejo en boca de políticos y sociólogos (me fío mucho más del segundo grupo). Baste decir que, bajando desde Pza. Roma, sentido Av. Madrid, a la izquierda hallamos 8 bares regentados por el grupo étnico antes referido, uno por hispanos (?) y dos se hallan en traspaso; en la acera derecha, tan sólo tres se identifican por rasgos orientales, mientras que de los cinco restantes, 1 también es "hispano". Más de un 50%, con presencia de Oriente, imagino que, además de en la barra, en la propiedad del establecimiento (del local es otra cosa, seguro). Eso, sin contar bazares y otro tipo de tiendas "chinas". Aún so pena de que cualquier soplagaitas me tilde de racista (o lo que le venga en gana): ¿es, comercialmente hablando, esto medio normal? ¿Y rentable para nuestra sociedad?

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